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Plasma rico en plaquetas (PRP), ¿Para qué?

Actualizado: 10 abr 2022

"Doctor, he oido hablar de algo que te sacan de la sangre y luego te inyectan para regenerar los tejidos. Se puede utilizar para mi problema de artrosis?"



Es relativamente frecuente recibir a pacientes en la consulta preguntando por este tipo de tratamiento, pero creo que la gente desconoce en qué consisten estas infiltraciones. Y hablo en plural, porque lo normal es, si nos decidimos a recibir un tratamiento de este tipo, necesitemos entre dos y tres inyecciones.


Lo primero será explicar que es el Plasma Rico en Plaquetas (PRPs):


Consiste en una muestra de sangre autóloga (del propio paciente), que se procesa para separar los glóbulos rojos, los glóbulos blancos (leucocitos) y las plaquetas, obteniendo de estas últimas unas concentraciones varias veces por encima de lo normal. Una vez procesada (normalmente se utiliza una centrifugadora y un sistema de separación de las distintas partes), nos quedamos solo con la fracción rica en plaquetas que es la que inyectaremos en la zona a tratar. Y a este concentrado hay veces que se le mezcla un activador, que suele ser Cloruro Cálcico o Trombina para que liberen los factores de crecimiento de forma más rápida y eficiente.


Aunque el procedimiento pueda parecer sencillo, se deben seguir unos estándares de asepsia en todos los pasos para evitar una contaminación de la muestra o los materiales a utilizar con el consiguiente riesgo de infección para los pacientes.


Los PRPs no deben utilizarse en pacientes con trombocitopenia, en tratamiento con anticoagulantes, infecciones activas, patología tumoral o metastásica y en embarazadas


Una vez explicado el procedimiento, valorando pros y contras así como los riesgos existentes según la zona a tratar, el paciente debe firmar un consentimiento informado, similar al que firmamos cuando vamos a ser sometidos a otras intervenciones quirúrgicas.

Y ahora estamos en condiciones de saber para qué utilizamos los PRPs, es decir, en qué patologías pueden ser útiles:

  • Lesiones musculares: Acelerando la recuperación del deportista

  • Tendinitis: Disminuye la inflamación y acelera la curación

  • Esguinces de ligamentos: Regenerando el tejido lesionado

  • Artrosis degenerativa: Alivia el dolor y disminuye el avance del desgaste

  • Heridas y Úlceras: Mejora la cicatrización

  • Fracturas que no consolidan: Favorecen el callo óseo



El tratamiento se aplica mediante una inyección en el músculo, tendón o articulación-hueso a tratar siempre asistido con ECOGRAFÍA para localizar exáctamente la zona de la lesión.

Pues esto es todo, no olvidéis que este tipo de terapias las debe hacer un profesional cualificado, bien formado en ecografía y en un centro que reúna las condiciones de calidad y seguridad necesarias.

Hasta pronto!!!

 



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